La historia va así. Un coche se detiene frente a un geriátrico. De él sale una señora mayor, con una aún más mayor del brazo (71 años de mundo viejuno), la lleva de paseíto hasta la puerta, toca el timbre (esto es un dato que he añadido a la dramatización de la historia para darle más fuerza), y sale corriendo hacia el coche, que le esperaba en marcha con una tercera señora mayor al volante y salen quemando rueda.
Entonces sale una cuca... digoooo una monja corriendo a la persecución del coche, y de pronto aquello se convierte en el trailer de la siguiente peli de Batman, con esa capa negra corriendo tras un coche a la fuga.
¿Como te quedas? Muerta.
Pues más muertas se quedaron las dos elementas que abandonaron a su madre, porque las han pillado. ¿Pero por qué se pensaban estas buenas mujeres que la gente abandona perros y bebés? ¿Porque abultan poco? Nooooooo... ¡¡porque no hablan!!
Y una vez trincan a la hija, esta canta más y peor que Esther Aranda y acaba de liar el parto, y cuenta que le había dicho a la señora muy muy major que la habían admitido en el geriátrico y por ello esta se había puesto voluntaria para ir. Lo de soltarla en la puerta e irse corriendo debió ser porque tenía prisa y no le gustan las despedidas.
Menos mal que estaba ahí Sor Matilda (o la monja Batman) para impartir justicia... que ha decidido que se queda a la señora, porque total, la única cama que tenían era para un señor muy muy mayor, y mira, se le propone para que abandone la casa antes de entrar, y atomarpolculo.
Hablando de hijos desagradecidos...
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